Construyendo una Ciudad con Cimientos Eternos: 33 Años de Iglesia Theopolis

En el trigésimo tercer aniversario de Iglesia Theopolis, reflexionamos sobre nuestro llamado como comunidad de fe y nuestra visión para el futuro. Basándonos en Hebreos 11:8-10, exploramos cómo podemos continuar construyendo una ciudad con cimientos eternos, diseñada y construida por Dios mismo.

Theopolis, que significa "ciudad de Dios", fue fundada en 1991 bajo la dirección del Pastor David Ridering. Durante estos 33 años, hemos sido bendecidos por el liderazgo de pastores fieles y el compromiso inquebrantable de miembros fundadores que establecieron los cimientos de nuestra comunidad.

1.  Obediencia con Visión Eterna
   La fe verdadera se manifiesta en una obediencia inmediata al llamado de Dios. Como Abraham, estamos invitados a:

• Responder al llamado sin demora
• Avanzar incluso sin ver el camino completo
• Mantener nuestra mirada en las promesas futuras
• Estar dispuestos a abrazar el cambio
• Construir un legado para futuras generaciones

"La fe ve lo invisible, cree lo increíble y recibe lo imposible."

2. Vivir Nuestra Identidad en Cristo
Como ciudadanos del cielo:

• Nuestra identidad trasciende las circunstancias terrenales
• Somos llamados a ser aprendices de Jesús, no solo "cristianos"
• Estamos comprometidos con estar con Jesús, ser como Jesús y hacer lo que Jesús hizo
• Crecemos mejor en comunidad

"En Theopolis somos una comunidad de aprendices comprometidos construyendo juntos el reino de Dios."

3. Construir sobre Cimientos Eternos
El éxito en el Reino no se mide por la altura de nuestros logros, sino por la profundidad de nuestros cimientos. Esto implica:

• Priorizar la transformación de vida sobre las estadísticas
• Valorar la fidelidad sobre la popularidad
• Enfocarse en el discipulado profundo sobre el crecimiento superficial
• Tomar decisiones basadas en oración y dirección del Espíritu Santo

Theopolis es más que un lugar de reunión; somos una comunidad de fe construida sobre cimientos eternos, donde cada acto de obediencia y amor es un ladrillo en la edificación del reino de Dios en la tierra. Te invitamos a ser parte de esta visión mientras continuamos construyendo sobre el único fundamento verdadero: Jesucristo.

"Los cimientos terrenales se erosionan con el tiempo, mientras que los cimientos eternos se fortalecen con cada prueba."