El fruto de la presencia: Mangos, Carácter y el Amor Inconfundible

Basado en el mensaje predicado por Egui Castro

Hace poco, mi vida cambió por culpa de un mango. Suena dramático, lo sé. Pero esta historia sobre una fruta me enseñó algo profundo sobre el amor de Cristo. Cuando mi esposa y yo vivíamos en Santa Isabel, descubrí una cepa de mango que literalmente transformó mi percepción de lo que un mango puede ser.

No voy a entrar en detalles vergonzosos, pero digamos que la escena de mí devorando esos mangos en el break room de mi trabajo no fue mi momento más elegante. Lo interesante es que estos mangos se ven iguales a otros mangos verdes. Pero cuando los pruebas, sabes cuál es cuál. Tienen un olor distinto, un sabor inconfundible. Y ahora, cada vez que como otro mango, una parte de mí siempre dice: "No es lo mismo." 

El amor inconfundible de Cristo

Así es exactamente como Jesús describe el amor que Sus discípulos deben tener. Juan 13:34-35: *"Un mandamiento nuevo os doy: que os améis unos a otros como yo os he amado... En esto conocerán todos que sois mis discípulos."*

Jesús no solo dice "ámense." Dice "ámense COMO YO los he amado." Está diciendo: "El amor que ustedes tienen debe ser tan distintivo, tan inconfundible, que cuando las personas lo prueben, sepan que es diferente."

Carácter vs Comportamiento

Aquí es donde muchos nos perdemos. Podemos imitar comportamientos cristianos: asistir a la iglesia, servir en ministerios, decir las palabras correctas. Pero Jesús está buscando un cambio en nuestro carácter.

Comportamiento = Lo que haces porque "se supone"
Carácter = Quién eres por transformación del Espíritu Es la diferencia entre:
 
- "Amo a esta persona porque soy cristiano" (comportamiento)
- "Amo a esta persona porque no puedo evitarlo" (carácter)

Como esos mangos: el mundo puede verse como cristiano. Pero solo el Espíritu Santo puede producir el carácter inconfundible de Cristo en ti. 

El fruto del Espíritu

Gálatas 5:22-23 lo llama "el fruto del Espíritu" —no el fruto de tu esfuerzo. Este fruto (amor, gozo, paz, paciencia, etc.) no viene de más estudio o más esfuerzo. Viene de que el Espíritu Santo **mora** en ti. Juan 14:17 dice que Él "mora con vosotros y estará en vosotros."

Morar = vivir contigo.

El tiempo que pasas con el Espíritu es lo que convierte comportamiento en carácter.

El amor tiene historia

Déjame compartirte algo más: el amor verdadero siempre existe en retrospección. Cuando le digo a mi hijo "te amo," él no lo cree por las palabras. Lo cree porque tiene un repertorio de momentos donde lo arropé, lo sostuve, fui paciente con él.

No es el "te amo" de hoy. Es la vida relacional que hemos construido. Así es como debemos amar en la iglesia. Cuando Jesús dijo "ámense como yo los he amado," Sus discípulos ya tenían una historia con Él.

Ya habían probado Su amor. El cristianismo no es instantáneo. Es una transformación que se vive en comunidad con el tiempo.

La Gracia es parte del proceso

Aquí está la verdad más hermosa: Jesús sabía que no podríamos hacer esto solos. Por eso envió al Espíritu Santo.

Como Pablo dice en Filipenses 1:6: *"El que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará."* Cristo no está buscando perfección en ti. Está buscando progreso en ti.

La invitación final

Si hoy reconoces que tu amor ha sido más "comportamiento" que "carácter"... Si has estado tratando de seguir reglas en lugar de permitir transformación... Esto no decepciona a Jesús. Él sabía que esto pasaría.

Hoy es una invitación a rendirte al Espíritu y decir: "No puedo hacer esto solo. Necesito que Tú cambies mi naturaleza. Necesito que Tú produzcas este fruto en mí."

Y cuando lo hagas, las personas van a probar ese "mango de Santa Isabel" en ti. Van a saber, inconfundiblemente, que han experimentado el amor de Cristo.
¿Quieres profundizar en estas verdades? Hemos creado una guía de oración y reflexión de 7 días para ayudarte a vivir estas cuatro herramientas cada día. Descarga la aplicación Iglesia Theopolis y ve a la pestaña "Conocer" para acceder a estos recursos. 

Descargar el app: >>> enlace<<<
Más herramientas: >>> enlace a herramienta <<<

Recuerda: la transformación genuina no ocurre solamente los domingos. Ocurre en los días entre domingo y domingo. 
 

Eliud Morales